Como ya he explicado, algunos opositores intentan desacreditar la convocatoria divina a pesar de la claridad de sus evidencias, con argumentos endebles que revelan la naturaleza maligna y el gran atrevimiento de sus autores contra la familia de Muhammad (a). Entre estos argumentos está que el Sayed Ahmed Alhasan (a) lee la aleya en la sura «Al-Qadr» (El decreto) de la siguiente manera: “Descienden los ángeles y el espíritu en ella con permiso de su Señor con todo asunto”. ¡Y que, por lo tanto, él sería –lejos está él de tal cosa– falaz; porque la lee diferente al ejemplar editado por Fahd que se encuentra hoy entre la gente!
Cuando le pregunté sobre este tema, él (a) dijo: «Dicen que Ahmed Alhasan lee “con todo asunto” y que esto discrepa de la copia escrita que se encuentra actualmente, y que todo aquel que discrepa de la copia escrita hoy es falaz. ¿No es así?
Entonces, según este razonamiento de ellos, todos los juristas shiíes usulíes son falaces; porque dicen cosas más graves que esta. Solo ve a sus libros de jurisprudencia, y no digo investigar; porque están llenos de comentarios sobre las lecturas. Uno prefiere una lectura y otro prefiere otra lectura. Es más, ve a los libros de dictámenes (fetuas)[1] sobre la lectura del libro del azalá que tienen, encontrarás que dicen que las suras del Corán son 112 y no 114, y dicen que hay dos basmalas adicionales.[2] Por lo tanto, se han descalificado a sí mismos; porque discrepan de la copia escrita. Esto primero.
Segundo: tienes el libro Kifaya al-Usul y el comentario de Al-Mishkini sobre él; porque esta versión se estudia en el seminario de Nayaf y trabajan con sus comentarios. Hay un pasaje en el Kifaya sobre la autenticidad aparente del Corán. ¿Ya lo has visto? ¿Has leído lo que dice el autor del libro y comenta Al-Mishkini sobre la cuestión de la adulteración del Corán? Léelo y encontrarás que el autor del libro favorece la idea de la adulteración, y Al-Mishkini confirma que hubo adulteración, por la reflexión y los informes. Los informes son conocidos, y por reflexión se refiere a la deficiencia en la retórica, la desconexión en las palabras, la deficiencia en la gramática, etc.
Esos son sus eruditos y grandes juristas usulíes hablando de adulteración y declarándola abiertamente. En cuanto a nosotros, ya les hemos dicho “solo considerad la lectura de la Gente de la Casa (a) como las otras siete lecturas aceptadas por vosotros”, ¡¿cuál es el problema?!
Por Dios, que un día le dije a un wahabi: Considerad la lectura de la Gente de la Casa como las otras siete lecturas que leéis. Se quedó callado y no respondió, aceptando lo que yo había dicho. Entonces, ¡¿qué les pasa a aquellos?! Esto fue a pesar de que este wahabi decía que la Gente de la Casa habló de una adulteración del Corán y argumentó sobre ello. Pero a aquellos los ha cegado la envidia y apenas entienden una palabra».
Y le pregunté sobre las siete lecturas y las siete letras, y que uno de los que debatieron con los ansar, que es uno de los jeques de los referentes religiosos y portavoz de ellos, argumentó diciendo que los Imames rechazaron quien hablara de las siete letras entre el público en general y dijo que hablar de siete lecturas es falso.
Él (a) dijo: «Este no distingue entre lo que dicen los hombres sobre las siete lecturas y lo otro que dicen de que el Corán descendió en siete letras.[3] Los sunníes dicen, según las narraciones que tienen, que el Corán descendió en siete letras. Significa que dicen que está permitido leerse en lugar de “el Poderoso, el Misericordiosísimo”, “El Poderoso, el Sabio”, y así sucesivamente. La Gente de la Casa (a) rechazó esto y dijo que el Corán es uno, descendió de parte de Uno, y esto no tiene ninguna relación con las siete lecturas.
Así que lo de las siete lecturas es algo posterior a lo que ellos habían dicho sobre las siete letras. La causa de ellos, es decir, de las siete lecturas, fue que después de que Uzmán hubo reunido a los hombres en torno a un solo ejemplar, es decir, un solo manuscrito –y no una sola lectura, porque no tenía puntos, vocales ni hamza–, ellos leían el manuscrito de múltiples formas, debido a lo que se imaginaba cada lector. Así que las lecturas se multiplicaron. Y fue durante la época omeya que la autoridad omeya unificó a los hombres en la lectura de los lectores considerados por los hombres y por la autoridad, y rechazaron que se copie o se lea el ejemplar de otras lecturas con puntos, vocales o hamza. Así pues, aceptaron siete y rechazaron las otras. Tú tienes la historia del Corán, así que debate con ellos con los libros, con lo que ellos tienen presente y con lo que se ha escrito en los libros de la historia del Corán.
Las siete lecturas estaban difundidas en la época de los Imames (a) y el ejemplar se escribía y se leía con todas ellas. Así pues, el Imam (a) dice: “Leed como leen los hombres”. Esto significa con la lectura que leen los hombres, que son siete lecturas o más, no una sola. Hasta hoy, quien tiene conocimiento de las siete lecturas las lee todas, como Abdul Basit, que lee las siete lecturas y cuando llega a una palabra con dos o tres lecturas, la lee más de una vez, cada vez con una lectura diferente».
Luego él (a) pidió a uno de los ansar que diera una clase sobre este asunto, para responder a este ignorante y refutar su argumento capcioso establecido en que todo el que diga algo que contradiga la versión impresa hoy, es decir, la edición de Fahd, es falso porque está diciendo que hay una adulteración.
Y él (a) le dijo: «En la clase, explica que todos los juristas shiíes dicen que «Ad-Duha» (La mañana) y «Ash-Sharh» (La abertura) son una sola sura, y que no está permitido leer una de ellas sola en el azalá ni es suficiente,[4] y trae sus opiniones.
Y trae también las narraciones de la Gente de la Casa sobre esto.[5]
Además, está la conexión entre «Ad-Duha» y «Ash-Sharh», pues está claro que esta última no es una sura, sino un complemento de «Ad-Duha». Es decir, que Dios al final de «Ad-Duha» dice: {Y en cuanto a la gracia de tu Señor, pues, proclámala}. ¿Cuál es esta gracia y por qué proclamarla? {¿No hemos abierto tu pecho y hemos depuesto de ti tu fardo…?}. Además, las dos suras «Al-Fil» (El elefante) y «Quraish» (Quraish) son una sola sura.
Y si quieres limitarte solo a lo que dicen sus juristas para no dispersar al oyente; porque los hombres apenas escuchan, quizá escuchen poco, edúcalos, házselos saber, por lo menos que los hombres tengan información y conocimiento, quizá uno de estos días se den cuenta del engaño de ellos y se salven a sí mismos».
[1] El erudito Al-Hilli dijo: “«Ad-Duha» (La mañana) y «Alam Nashrah» (¿No hemos abierto?) son una sola sura. No se debe separar a una de la otra en una misma raka. Y lo mismo ocurre con «Al-Fil» (El elefante) y «Li-Ilaf» (Por el convenio) según nuestros eruditos…”, Tadkira al-Fuqaha, cuestión 233. El Sayed Al-Joei dijo: “Las dos suras «Al-Fil» y «Li-Ilaf» son una sola sura, y lo mismo ocurre con las dos sura «Ad-Duha» y «Alam Nashrah», así que no es suficiente solo de ellas, sino que se debe juntarlas…», Minhay as-Salihin, cuestión 605. Y lo mismo otros juristas.
[2] Al-Muhaqqiq al-Hilli dijo: “Tercero: Nuestros compañeros han narrado que «Ad-Duha» y «Alam Nashrah» son una sola sura. Asimismo «Al-Fil» y «Li-Ilaf», así que no está permitido separar una de su compañera en cada raka. Y no se requiere la basmala entre ellas según lo más evidente”, Sharai al-Islam, vol. 1, pág. 66. Asimismo, Ibn Fahd Al-Hilli dijo: “Segundo: «Ad-Duha» y «Alam Nashrah» son una sola sura, y asimismo «Al-Fil» y «Li-Ilaf». ¿Debe repetirse la basmala entre ellas? Se dijo que no, y es lo más probable”, Al-Muhaddab al-Bari, vol. 1, pág. 365.
Al-Muhaqqiq dijo en Al-Mutabar: “Si fueran dos suras, debería observarse la basmala. Y si fueran una sola sura, no debe repetirse, por consenso de que no son dos aleyas de una sola sura”.
Ash-Shahid al-Awwal, mientras hablaba sobre el Corán y la unión entre suras, dijo: “Sobre la unión se dicen dos cosas; la más cercana es que es detestable, excepto para las dos suras «Ad-Duha» y «Alam Nashrah», y para las suras «Al-Fil» y «Li-Ilaf». La basmala es obligatoria entre ellas. Y si las ponemos como una sola sura, no es obligatoria la basmala”, Ad-Durus, vol. 1, pág. 173. Está claro que lo dicho por casi todos los juristas contemporáneos es que son una sola sura.
[3] Véanse: Sahih Al-Bujari, vol. 3, pág. 91, Sahih Muslim, vol. 2, pág. 202, Musnad Ahmad, vol. 1, pág. 24 y muchos otros.
[4] Consúltese lo mencionado anteriormente en la página 20, en el pie de página, con respecto a su prohibición, que es algo reconocido entre todos los eruditos posteriores.
[5] Se narró de Zaid Ash-Shaham, que dijo: «Abu Abdulá (a) rezó con nosotros el alba, y leyó «Ad-Duha» y «Alam Nashrah» en una sola raka», Tahdib, vol. 2, pág. 72, hadiz 266. Y Mufaddal narró de él (a): «Lo escuché decir: “No juntes dos suras en una sola raka, excepto «Ad-Duha» y «Alam Nashrah», y las suras «Al-Fil» y «Li-Ilaf»”», Muyam al-Bayan, 10:544, Al-Mutabar, 2:188.
Del libro Con el Siervo Bueno de Ahmed Alhasan (a)