Y sobre el sello de la profecía y su relación con la Prueba de Dios, el Siervo Bueno (a) dijo: «No existe ningún albacea de entre los albaceas del Mensajero Muhammad (s) que no esté marcado con este sello. No siempre es visible en la creación, pero muchos de aquellos a quienes Dios descorre los velos lo ven y reconocen por él la Prueba de Dios».
Del libro Con el Siervo Bueno de Ahmed Alhasan (a)