En nombre de Dios, el Misericordioso, el Misericordiosísimo
Y la alabanza a Dios
En el testamento del Mensajero de Dios, Muhammad (s) a Alí (a),
De Muhammad Bin Yahia, de Ahmed Bin Muhammad Bin Isa, de Alí Bin An-Numan, de Muawiya Bin Ammar que dijo: Escuché a Abu Abdulá (a) decir: En el testamento del Profeta (s) a Alí (a), él dijo: «Oh Alí, delego en ti cualidades, así pues, memorízalas de mí». Después dijo: «Oh Dios, ayúdalo. En cuanto a la primera, es la veracidad y que no salga de tu boca jamás una mentira. La segunda es la piedad, jamás te atrevas a la traicionar. La tercera, el temor a Dios, que su recuerdo se fortalezca como si lo estuvieras viendo. La cuarta, es la abundancia de llanto por temor a Dios, por cada lágrima se construyen para ti mil casas en el Paraíso. La quinta, es que pongas tus bienes y tu sangre por debajo de la religión. La sexta, es adoptar la costumbre de mi azalá, de mi ayuno y mi caridad. En cuanto al azalá, son cincuenta rakas, y en cuanto al ayuno, tres días al mes, al comienzo un jueves, a mediados un miércoles y al final un viernes. En cuanto a la caridad, esfuérzate hasta que digas “me he agotado” y no has de agotarte. Debes hacer el azalá de la noche, y debes hacer el azalá del zawal, debes hacer el azalá del zawal, debes hacer el azalá del zawal. Debes recitar el Corán en toda situación, debes alzar tus manos en tu azalá escrutándolas y debes usar el siwak en cada ablución. Debes adoptar lo virtuoso de la ética y evitar lo que se parece a la ética, si no lo haces no eches la culpa a nadie más que a ti mismo»”, Al-Kafi vol. 8, pág. 79.