Pregunta 6: Aquí hay quienes argumentan contra el islam por la violencia, no sólo de hoy, sino en tiempos del Profeta (s), y que éste se ha extendido por la espada. ¿Cómo explica usted estos pasajes coránicos que instan a matar, a excluir y a marginar?: sura «Al Imrán» (La familia de Imrán), 85, 91 ,83, sura «At-Tauba» (El arrepentimiento), 29, sura «An-Nisa» (Las mujeres), 91, sura Muhammad. ¿Cómo explica los versículos de la herencia y el testamento que violan los derechos civiles de las mujeres?
Respuesta: La cuestión de la lucha en la religión divina en general y no sólo en el islam está explicada en el libro La lucha es la puerta del Paraíso.[1] Con respecto a los versículos del Corán que consideran que incitan a la violencia o a la marginación de demás:
Primero: sura «Al Imrán» (La familia de Imrán):
{19 Ciertamente, la religión según Dios es el islam. Y no disintieron los que recibieron el libro sino después de que les llegó la ciencia, por codicia entre ellos. Y quien no crea en los signos de Dios, pues Dios es rápido en la cuenta} {83 ¿Es pues algo distinto a la religión de Dios lo que anhelan? Y a Él se entregan quienes están en los Cielos y la Tierra, con obediencia y con aversión. A Él han de regresar} {85 Y quien ansíe algo distinto al islam como religión no se le aceptará y en la otra vida será de los perdedores}.
Significado: «Al Imrán» (la familia de Imrán): {¿Es pues algo distinto a la religión de Dios lo que anhelan? Y a Él se entregan quienes están en los Cielos y la Tierra, con obediencia y con aversión. A Él han de regresar Di: «Hemos creído en Dios y en lo que ha descendido a nosotros, y en lo que ha descendido a Abraham, y a Ismael, y a Isaac, y a Jacob, y a las tribus, y en lo que ha recibido Moisés, y Jesús, y los profetas, de su Señor. No discriminamos entre ninguno de ellos y somos para Él, musulmanes» Y quien ansíe algo distinto al islam como religión no se le aceptará y en la otra vida será de los perdedores}, sura «Al Imrán» (La familia de Imrán), 83-85.
El versículo 84 de la sura «Al Imrán» describe claramente el significado del islam en los versículos como una entrega a Dios y al sucesor de Dios en su tierra en todo momento. Él es el designado según la ley del califato de Dios en su tierra, la cual ha existido desde el primer día del primer ser humano sobre esta Tierra, el profeta de Dios, Adán (a), nombrado por Dios como sucesor en su Tierra.
Estos versículos no son con el propósito de marginar o juzgar a nadie, sino con el propósito de declarar la Ley de Fe aceptada por Dios, que es entregarse a Él y a su sucesor en su Tierra. Pero si consideraras que establecer una ley de fe es marginar a otros que no la aceptan, tus palabras significan que todas las personas de religión, ‒considerando que tienen una ley de fe‒, marginan a los demás. Además, la cuestión se extendería a cada grupo que crea en una ideología en particular.[2]
Segundo: «At-Tauba» (El arrepentimiento), 29, {Matad a los que no creen en Dios ni en el día final, ni prohíben lo que ha prohibido Dios y su mensajero, ni acatan la religión de la verdad, de los que han recibido el libro, hasta que entreguen el tributo de sus manos, sumisos}.
Significado: El Corán es una unidad integral, y lo que hacen los wahabis para pasar sus falsas creencias y sus fatwas para matar gente, y lo que hacen los cristianos y otros en estos días para desafíar al Corán, es un proceso de cortar versículos de un libro que es una unidad integral, de la cual ninguna parte puede separarse del todo o de las demás partes.[3] Dios ha aclarado que el Corán es una unidad integral que no se puede dividir y que quien la divida es alguien tendencioso que quiere desafiar de forma absurda o al azar, como quien señala a alguien que dice «no hay dios sino Dios»: “eres un infiel y niegas la existencia de Dios porque dices «no hay dios»”, o alguien que busca transmitir una creencia o un dictamen corrupto con un propósito suyo, como lo han hecho los wahabis (o salafis).
Estos son versículos coránicos que prohíben esta comportamiento desviado y tendencioso de la fragmentación del Corán:
{… ¿Acaso creéis en una parte del libro y no creéis en otra? Pues, ¿cuál ha de ser la recompensa de quién obra así de vosotros sino la vergüenza en la vida del Mundo Temporal y el Día de la Resurrección ser enviado al más severo tormento? Y no está Dios desatento de lo que hacéis} sura «Al-Báqara» (La vaca), 85.
{Los que han hecho del Corán, migas. Así pues, por tu Señor, que hemos de preguntarles a todos sobre lo que estaban haciendo}, sura «Al-Hiyr» (El rocoso), 91-93.
En cuanto al versículo 29 de sura «At-Tauba» (El arrepentimiento), debemos leer los versículos posteriores para ver claramente por qué Dios instó a los creyentes a matar aquí:
«At-Tauba» (El arrepentimiento), {Matad a los que no creen en Dios ni en el día final, ni prohíben lo que ha prohibido Dios y su mensajero, ni acatan la religión de la verdad, de los que han recibido el libro, hasta que entreguen el tributo de sus manos, sumisos Y han dicho los judíos: «Uzair es el hijo de Dios», y han dicho los cristianos: «el Mesías es el hijo de Dios». Eso es lo que han dicho con sus bocas. Se asemeja a lo dicho por los que no han creído antes. Así pues, que los mate Dios. que dijeron anteriormente los que no creían. Que Dios les maldiga, ¡cómo mienten! Han tomado a sus doctores y a sus monjes como señores delante de Dios, y al Mesías, hijo de María. Y no se les ordenó, sino que adoren un dios único. No hay dios sino Él, Glorificado sea de lo que asocian Quieren apagar la luz de Dios con sus bocas, y se rehúsa Dios excepto a que se complete su luz, aunque les aborrezca a los infieles Él es quien ha enviado a su mensajero con la guía y la religión de la verdad para que se manifestara sobre la religión, cada una, aunque les aborrezca a los politeístas}, 29-33.
Por lo tanto, Dios les insta a matarlos porque ellos fueron quienes iniciaron la guerra, {Quieren apagar la luz de Dios con sus bocas, y se rehúsa Dios excepto a que se complete su luz, aunque les aborrezca a los infieles}. Y no creo que incitar a matar a otro, o prepararse para matar a otro, o preparar equipo para matar a otro no sea una guerra, y creo que querer apagar la luz de Dios con sus bocas conlleva a estas cosas y más.[4]
Si se toman estos versículos anteriores que son alegóricos y se responde a ellos, hay un versículo claro y explícito que aclara que Dios insta a los creyentes a matar a quienes los maten; Dios prohíbe a los creyentes atacar a los demás, y lo alegórico depende de lo explícito. Dijo el Altísimo: {Y matad en el camino de Dios a los que os matan, y no agredáis. Ciertamente, Dios no ama a los agresores}, sura «Al-Báqara» (La vaca), 190.
Además, la acción del mensajero Muhammad es clara, ya que los judíos ‒que son la gente del libro‒, vivían con él en Medina, sanos y salvos, y él nos los tocó hasta que ellos empezaron a combatir contra él y a ayudar a los que luchaban contra él.
Cabe señalar que en el islam y la religión divina no se considera que la religión esté separada de la política; sino que el gobierno y la política son parte de la religión, por lo tanto, muchos versículos del Corán son leyes militares que aclaran los derechos de un soldado en la batalla y lo que puede hacer a quienes luchan contra él que combata tiene permitido hacer; el creyente no mata ‒incluso al que luche contra él‒, excepto por una orden de Dios, para ser recompensado. Y es por eso que Dios ha prescrito que los creyentes maten en el campo de batalla a aquellos que luchan contra ellos y ha aclarado este mandamiento en los versículos coránicos. Así como los estados promulgan leyes para sus ejércitos, aclarando los derechos de sus soldados en el campo de batalla, lo que está permitido y lo que no, etc.
Tercero: {Encontraréis a otros que quieren estar a salvo de vosotros y a salvo de su gente. Cada vez que son restituidos a la sedición, recaen en ella. Así pues, si no se apartan de vosotros, y se encuentran con vosotros de paz y alejan sus manos, tomadlos y matadlos donde los halléis. Y he aquí, hemos puesto para vosotros sobre ellos un poder evidente}, sura «An-Nisa» (Las mujeres), 91.
¿Dónde está el problema en este versículo?
Insta a matar al infiel guerrero cuya mano no deja de dañar a los creyentes.
Además, el versículo anterior a este, en la misma sura, también establece que está permitido hacer treguas con aquellos que buscan la paz y que no combaten contra los creyentes ni buscan dañarlos: {Excepto a los que se unan a una gente entre vosotros y ellos, como un pacto, o hayan oprimido sus pechos por mataros o matar a su gente. Y si Dios hubiera querido los habría empoderado contra vosotros y os hubieran matado. Así pues, si se apartan de vosotros y no os matan, y se encuentran con vosotros de paz, entonces no ha de poner Dios para vosotros, contra ellos, ningún camino}, sura «An-Nisa» (Las mujeres), 90.
Cuarto: {Así pues, si encontráis a los que no han creído, entonces golpead las cervices hasta cuando los hayáis debilitado, así pues, tenzad los lazos. Luego, que sea benevolencia después, o que sea rescate, hasta que deponga la guerra sus cargas. Así sea. Y si quisiera Dios, se vengaría de ellos, pero es para probar a algunos de vosotros con otros. Y los que hayan sido matados en el camino de Dios, pues no se malograrán sus obras}, sura «Muhammad» (Muhammad), 4.
Significado: Este versículo aclara algunos de los derechos de los soldados creyentes –en el ejército islámico‒ durante la guerra y en el campo de batalla, y que tienen el derecho de matar a los infieles que luchan contra ellos.[5] Resulta que también tienen derecho a tomar prisioneros y a darles la libertad a cambio de otros; o entregarlos sin nada a cambio, o intercambiarlos, o pedir algo a cambio… etc.
¿Dónde está el problema en este versículo? Ya hemos dicho que el Corán es una ley divina, no solo para la adoración, sino también para la política y el gobierno divino, los derechos y las obligaciones de los creyentes, etc.
Quinto: Quien dice que las mujeres han sido agraviadas por ciertas leyes como la herencia[6] o el testimonio, debe mostrarnos el equilibrio y el patrón de medida son los cuales determinó lo que es justicia o injusticia, y con lo cual decidió o determinó que las mujeres deben ser llanamente iguales al hombre en todo, aunque todos vemos que la mujer no es igual al hombre en todo.[7]
Además: aquellos que quieren criticar ciertas leyes dentro de un sistema legal y legislativo deben observar estas leyes como parte de este sistema, y no cortar una parte y tratarla aisladamente del sistema en su conjunto.
Se supone que deben verse dentro de la ley divina, al menos, los derechos y las obligaciones de las mujeres, y no solo los derechos, diciendo que a las mujeres se les han dado menos derechos que a los hombres en la ley divina. ¿Por qué no mira las obligaciones y dice que un hombre tiene más obligaciones que una mujer en la ley divina?
Por ejemplo: dos personas, a una de las cuales se le encargó construir un edificio de cinco plantas y a la otra de diez; ¿es justo darles la misma cantidad de materiales de construcción y el mismo dinero para construir? Y si le das al constructor de las diez plantas el doble de lo que le das a la de cinco plantas, ¿es correcto que alguien venga y diga «eres injusto, porque ambas trabajan para ti y no les das lo mismo»?
Creo que aquellos que dicen que las mujeres han sido agraviadas por esta legislación es porque sus palabras y determinación son improvisadas y están lejos de una cuidadosa investigación científica.
[1] El libro El yihad es la puerta al Paraíso del Sayed Ahmed Alhasan. Este es un extracto de él: “La lucha en las religiones divinas: la lucha o el combate por defender la palabra de Dios, y difundir el monoteísmo y la religión que Dios, Glorificado y Altísimo, acepta es una cuestión decidida por Dios Glorificado. Él instó a ella a los creyentes, la hizo obligatoria para ellos, prometió el Paraíso a quienes luchen en su camino y amenazó con el fuego a quienes eviten la lucha. Los profetas y enviados (a) son los portadores de la palabra de Dios Glorificado y son los portadores de la bandera de la lucha y el combate en el camino de Dios Glorificado. Esta es la historia de los profetas y enviados (a) en vuestras manos. Explorad la Torá, el Evangelio y el Corán para encontrar a Moisés (a) llevando su espada y preparándose para entrar a Tierra Santa, a Josué hijo de Nun (a) sosteniendo su espada y entrando a Tierra Santa, a David (a) pasando días luchando para sostener la palabra de Dios y difundir el monoteísmo… y luego a Jesús diciendo a sus seguidores: «Si alguno quiere venir en pos de mí, tome su cruz, y sígame», es decir, que invite a la revolución contra la injusticia y la corrupción, y que ordene a sus seguidores luchar y combatir en el camino de Dios, porque la cruz en ese tiempo equivale a la mortaja de nuestros días, es decir, es como si dijera a sus seguidores, quien quiera seguirme que lleve su mortaja…
En la Torá (Antiguo Testamento, Josué 10) dice: [34 Josué, y todo Israel con él, pasó de Laquis a Eglón, y acamparon cerca de ella y la atacaron. 35 La conquistaron aquel mismo día y la hirieron a filo de espada; y destruyó por completo aquel día a todas las personas que había en ella, conforme a todo lo que había hecho a Laquis. 36 Entonces subió Josué, y todo Israel con él, de Eglón a Hebrón, y pelearon contra ella. 37 La conquistaron y la hirieron a filo de espada, con su rey, todas sus ciudades y todas las personas que había en ella. No dejó ningún sobreviviente, conforme a todo lo que había hecho a Eglón. La destruyó por completo con todas las personas que había en ella. 38 Después Josué, y todo Israel con él, se volvió contra Debir y peleó contra ella. 39 La conquistó, con su rey y todas sus ciudades, hiriéndolas a filo de espada; y destruyó por completo a todas las personas que había en ella. No dejó sobreviviente alguno. Como había hecho con Hebrón, y como había hecho también con Libna y su rey, así hizo con Debir y su rey. 40 Hirió, pues, Josué toda la tierra: la región montañosa, el Neguev, la tierra baja y las laderas, y a todos sus reyes. No dejó ningún sobreviviente, sino que destruyó por completo a todo el que tenía vida, tal como el SEÑOR, Dios de Israel, había mandado. 41 Josué los hirió desde Cades-barnea hasta Gaza, y todo el territorio de Gosén hasta Gabaón. 42 A todos estos reyes y sus territorios los capturó Josué de una vez, porque el SEÑOR, Dios de Israel, combatía por Israel. 43 Y volvió Josué, y todo Israel con él, al campamento en Gilgal] … esta es la imagen de uno de los días que Josué hijo de Nun pasó en la lucha y el combate por defender la palabra de Dios y difundir la religión de Dios y el monoteísmo en esta Tierra».
[2] Por ejemplo: en la introducción del libro La Ley de Fe del Papa Shenouda dice: “… la importancia de la Ley de Fe (Símbolo Niceno) es que todas las iglesias del mundo cristiano crean en una única ley de fe aprobada por todas las iglesias, por lo que debe ser establecida por un Concilio Ecuménico compuesto por representantes de todas las iglesias ecuménicas.
La ley en nuestras manos fue redactada en el Concilio Ecuménico de Nicea en el año 325 d.C, y fue el primer Concilio Ecuménico, en respuesta a la Controversia Arriana que negaba la divinidad de Cristo… Todas las Iglesias del mundo ‒aunque difieran en algunas creencias‒ creen en todas las disposiciones de la Ley de Fe. Cualquier grupo que no crea en todo lo que está en la Ley de Fe no se considera cristiano. Como los testigos de Jehová y los adventistas, que creen en la Biblia y en sus dos Testamentos “según sus propias traducciones”, pero no creen en todas las creencias cristianas contenidas en la Ley de Fe (Símbolo Niceno) …”.
[3] El uso de un versículo aislado del resto del libro es un tema grave, advertido también por los cristianos y rechazado por sus clérigos. Por eso encontramos, por ejemplo, al Papa Shenouda III dedicando un capítulo especial de su libro La salvación en el concepto ortodoxo y lo tituló “El peligro de utilizar un solo versículo”, asi como el obispo Bishoy de Damietta en su serie de Simplificación de las conferencias de fe donde el pasaje 115 también lleva el mismo título “El peligro de utilizar un solo versículo”. Y este es el texto de las palabras del Papa Shenouda: “Al tratar el tema de la salvación, como es el caso con cualquier otro tema, deben ser plenamente conscientes, hermanos, del peligro de usar un solo versículo separado de los otros versículos de la Santa Biblia. La Santa Biblia no son meros versículos, sino un espíritu que implica todas sus partes. Una persona insensata pone delante de sí solo un versículo o parte de un versículo, separándolo de las circunstancias y de la ocasión en que se dijo, e incluso del contexto general. Pero un investigador sabio que busca la verdad, reúne todos los textos relacionados con el tema de su investigación para ver lo que indican…”.
[4] En el Diccionario Bíblico se explica la palabra “matar”: “Permitido matar: matar es lícito u obligatorio en los siguientes casos como se menciona en el libro… C‒ la ley requiere la muerte implacable de enemigos en la guerra. Algunos profetas han recomendado proscribir a algunos enemigos viles de Dios, es decir, que recomendaron exterminarlos a ellos y a su ganado…”
Además, los eruditos de la Iglesia consideraron la lucha, la resistencia contra el invasor y la defensa de la patria como valores establecidos y fundamentales. El Papa Shenouda III dijo: “… uno de los valores establecidos y fundamentales obligatorio para todo ser humano es el amor a su patria, su defensa y el sacrificio de sangre por ella si fuera necesario.” Artículo: Valores y principios entre títulos y conceptos publicado en el periódico Al-Ahram, 6 de agosto del 2006.
[5] Este es asunto reconocido por la naturaleza humana y todos los libros celestiales. Hemos citado algunos de los pasajes del Antiguo Testamento, en el que los judíos y cristianos creen, y también es reconocido por todas las sociedades humanas, religiosas o no.
[6] En el Antiguo Testamento dice: [1 Entonces las hijas de Zelofehad, hijo de Hefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, de las familias de Manasés, hijo de José, se acercaron; y estos eran los nombres de sus hijas: Maala, Noa, Hogla, Milca y Tirsa. 2 Y se presentaron delante de Moisés, delante del sacerdote Eleazar, delante de los jefes y de toda la congregación, a la entrada de la tienda de reunión, diciendo: 3 Nuestro padre murió en el desierto, aunque no estuvo entre el grupo de los que se juntaron contra el SEÑOR, en el grupo de Coré, sino que murió por su pecado, y no tuvo hijos. 4 ¿Por qué ha de desaparecer el nombre de nuestro padre de entre su familia sólo porque no tuvo hijo? Dadnos herencia entre los hermanos de nuestro padre. 5 Y Moisés presentó su caso ante el SEÑOR. 6 Entonces el SEÑOR habló a Moisés, diciendo: 7 Las hijas de Zelofehad tienen razón en lo que dicen. Ciertamente les darás herencia entre los hermanos de su padre, y pasarás a ellas la herencia de su padre. 8 Además, hablarás a los hijos de Israel, diciendo: «Si un hombre muere y no tiene hijo, pasaréis su herencia a su hija. 9 «Y si no tiene hija, entonces daréis su herencia a sus hermanos. 10 «Y si no tiene hermanos, entonces daréis su herencia a los hermanos de su padre. 11 «Y si su padre no tiene hermanos, entonces daréis su herencia al pariente más cercano en su familia, y él la poseerá. Y será norma de derecho para los hijos de Israel, tal como el SEÑOR ordenó a Moisés.» Números 27. Esta es la ley de herencia contenida en la Torá, en la que los judíos y los cristianos creen, y no hay igualdad entre mujeres y hombres, sino que una niña no hereda si hubiere un niño. El padre Antonios Fekry dice: “…una nueva ley era que, si el difunto no tenía hijo, entonces su hija lo heredaría, y si no tuviera hija entonces sus hermanos, tíos o parientes más cercanos.” Explicación de la Biblia, “La Interpretación de Números”.
[7] A pesar de lo obvio de esto, citaré un texto del Papa Shenouda III: “… si miramos la Biblia y las tradiciones de la Iglesia antigua encontramos lo siguiente: 1. La mujer no enseña en la Iglesia: y por eso dice San Pablo Apóstol: ‘Que las mujeres aprendan en silencio con toda sumisión. Pero las mujeres no están autorizadas a enseñar o ser dominantes sobre el hombre, sino a estar en silencio. Porque Adán fue formado primero que Eva. Adán no fue seducido, sino que la mujer fue seducida y cometió la transgresión. Pero será salva por el nacimiento de sus hijos si es firme en la fe, el amor y la santidad con cordura.’ Observamos que la enseñanza de San Pablo Apóstol en este campo, justificaba esta restricción, que no tiene nada que ver con las condiciones sociales de la época ni con las circunstancias especiales de la Iglesia patrocinada por su discípulo Timoteo, sino basada en asuntos concernientes a hombres y mujeres desde el comienzo de la creación… 11. Obstáculos en la práctica: Existen obstáculos en la práctica para las mujeres por el embarazo, el parto y la lactancia, por los que algunas empleadas se toman largos descansos de su trabajo. El oficio del sacerdocio puede llevar al descuido completo de su función de ama de casa, e incluso de la crianza de los niños.” La opinión de la Iglesia Ortodoxa sobre el sacerdocio de la mujer.
Extracto del libro El decimotercer discípulo de Ahmed Alhasan (a)