{Di: «No ha de prestaros atención mi Señor si no está vuestra súplica»}.
«Oh, Dios, te pido por Tu nombre, ante el cual se someten todas las cosas, y por Tu misericordia que abarca todas las cosas, y por Tu grandeza ante la cual se humillan todas las cosas, y por Tu poder que ha subyugado todas las cosas, y por Tu fuerza que ha subordinado todas las cosas, y por Tu omnipotencia que ha superado todas las cosas, y por Tu saber que ha rodeado todas las cosas, oh, Luz, oh, Santísimo, oh, Primero antes de todas las cosas, oh, Eterno después de todas las cosas, oh, Dios, oh, Misericordioso. Bendice a Muhammad y a la familia de Muhammad, y perdóname los pecados que adulteran la bendición, y perdóname los pecados que hacen descender la desgracia, y perdóname los pecados que cortan la esperanza, y perdóname los pecados que fortalecen a los enemigos, y perdóname los pecados que recusan la súplica, y perdóname los pecados que merecen que descienda la prueba, y perdóname los pecados que retienen la lluvia del cielo, y perdóname los pecados que descubren las faltas, y perdóname los pecados que aceleran la aniquilación, y perdóname los pecados que legan el arrepentimiento, y perdóname los pecados que desgarran la integridad, y vísteme con Tu coraza fuerte e inquebrantable, y apártame del mal del que me guardo noche y día en lo queda de este año. Oh, Dios, Señor de los siete cielos y Señor de las siete tierras, y de lo que hay en ellos y de lo que hay entre ellos, y Señor del Trono Grandioso, y Señor de las siete loas y del Corán Grandioso, y Señor de Israfil, de Miguel y de Gabriel, y Señor de Muhammad, bendígale Dios a él y a su familia, señor de los enviados y sello de los profetas. Te pido por Ti y por aquello con lo que Tú mismo te has nombrado, oh, Grandioso. Tú eres el que concedes con lo sublime y deshaces todo temor, que das todo abundantemente y duplicas las buenas obras por poco y por mucho, y haces lo que quieres, oh, Poderoso, oh, Dios, oh, Misericordioso. Bendice a Muhammad y a la Gente de su Casa, y vísteme en lo queda de este año con tu protección, y haz brillar mi rostro con Tu luz, y ámame con Tu amor, y hazme alcanzar Tu complacencia y la excelencia de Tu generosidad, y lo cuantioso de Tu dádiva, y dame de lo mejor que tienes y de lo mejor que Tú das a alguien de Tu creación, y vísteme con Tu bienestar, oh, Sitio de toda queja, oh, Testigo de toda confidencia, oh, Sabedor de toda cosa oculta, oh, Defensor de las calamidades que quieres, oh, Generoso de perdón, oh, Bondadoso indulgente, hazme morir en el credo de Abraham y su naturaleza, en la religión de Muhammad, bendígale Dios a él y a su familia, y en su tradición, y con mejor muerte págame, aliado de tus partidarios, y enemigo de tus enemigos. Oh, Dios, apártame en este año de toda acción, dicho o hecho que me distancie de Ti, y acércame a toda acción, dicho o hecho que me acerque a Ti en este año. Oh, el Más Misericordioso de los misericordiosos, protégeme de toda acción, dicho o hecho mío, temo el perjuicio de su consecuencia, y temo Tu aborrecimiento hacia mí por ello, no sea que apartes Tu generoso rostro de mí y me prives de mi suerte junto a Ti. Oh, Compasivo, oh, Misericordiosísimo. Oh, Dios, ponme en lo que queda de este año en Tu protección, a Tu amparo, a Tu cuidado, y cúbreme con la protección de Tu bienestar, y concédeme Tu generosidad, la gloria de Tu vecino. Sublime es Tu loa y no hay divinidad sino Tú. Oh, Dios, hazme seguidor de los buenos que se allegaron a tus partidarios. Úneme a ellos y hazme musulmán de quienes dijeron la verdad sobre Ti entre ellos. Me refugio en Ti, oh, Dios, de que mis faltas, injusticias y excesos me rodeen contra mi alma, de que siga mis deseos, de que me entregue a mis pasiones, y que esto se interponga entre mi y Tu misericordia y Tu complacencia, y sea yo olvidado por Ti, expuesto a Tu cólera y a Tu venganza. Oh, Dios, concédeme el éxito en toda buena acción con la que Te complazcas de mí, y acércame más a Ti. Oh, Dios, así como Tú fuiste suficiente para Tu profeta Muhammad, bendígale Dios y a su familia, contra el terror de sus enemigos, y regocijaste sus preocupaciones y quitaste sus aflicciones, y cumpliste con él Tu promesa, y le cumpliste Tu alianza. Oh, Dios, sé así Tú, suficiente para mí contra el terror este año de sus desgracias, sus enfermedades, sus tribulaciones, sus iniquidades, sus tristezas y la estrechez del sustento en él, hazme alcanzar por Tu misericordia el más completo bienestar y la continuidad de la bendición hasta el final de mi plazo. Te pido esto como un pecador injusto arrepentido y confeso. Y te pido que me perdones los pecados pasados que han inventariado tus custodios y que tus ángeles han enumerado contra mí, y que me guardes, oh, Divinidad mía, de los pecados en lo que me quede de vida hasta el final de mi plazo. Oh, Dios, oh, Misericordioso, oh, Misericordiosísimo. Bendice a Muhammad y a la Gente de la Casa de Muhammad, y concédeme todo lo que te he pedido anhelando con ello ir hacia Ti, pues Tú me has ordenado la súplica y me has garantizado la respuesta, oh, el Más Misericordioso de los misericordiosos».[1]
[1] Fuente: Misbah al-Mutahaÿid (La lámpara del que pasa la noche en oración) – At-Tusi, pág. 604, súplica del primer día del mes de Ramadán.