En nombre de Dios, el Misericordioso, el Misericordiosísimo
La paz sea con vosotros y la misericordia de Dios y sus bendiciones
Pido a Dios que estés bien y con bienestar
Que Dios incremente vuestra recompensa y acepte vuestras obras
Quiero compartir con vosotros estos versos en estos gloriosos días, los días de Husein, el inmortal, que expuso y se rebeló y expuso el golpe contra el nombramiento divino.
«La paz sea con Al-Hurr en tu arena,
Y qué gloriosa irrupción su irrupción
La paz sea con él en la medida del tormento
Y en la medida de su noble desgarro
La paz sea con él… tanto como el reproche
Reproche del locamente enamorado de él por su pérdida
Pues cómo, mil espadas has embridado
Y tu vida oh libre, ¡¿no has embridado?!
¿Y cómo has cejado?, ¿y en mil espadas?
Y si yo hubiera estado solo no hubiera cejado
Ni les hubiera dado tiempo para rodearme
en círculo, oh sangre mía
Hubiera arrancado las fronteras del Iraq
Aunque sus bridas estuviesen en mi boca
Hubiera cambiado la historia de este suelo
¡Y no concedido de ella a los hijos de Mulyam!»
Versos del poeta iraquí, Sr. Abdurrazzaq Abdul Wahid
