En nombre de Dios, el Misericordioso, el Misericordiosísimo
Y la alabanza a Dios
Aclaración de la fidelidad de David
{Y les derrotaron, con el permiso de Dios. Y mató David a Goliat y Dios le entregó el reino y la sabiduría, y le enseñó de lo que Él quiso. Y si no hubiera repelido Dios, a los hombres, algunos de ellos con otros, hubieran corrompido la tierra. Pero Dios está dotado del favor sobre los mundos}, sura «Al-Báqara» (La vaca), 251.
David, el más pequeño de los hijos de su padre –su padre le crió para el cuidado del ganado, no estaba ni siquiera entre los soldados– y la honda destinada para arrojar piedras, ninguno de los hombres contaba con que él sería la solución de la batalla.
El número que no había sido contado (David),
y el equipo que no habían considerado (las piedras) los hombres
eran junto a Dios todo el número y todo el equipo.
La piedra que desecharon los constructores se convirtió en la piedra angular.
Esos son los cálculos de los hombres,
y éste es el cálculo de Dios, Glorificado sea y Altísimo.
Pues los hombres ven lo material y los cuerpos, y Dios observa los espíritus y la devoción,
Y observó, Glorificado sea, la devoción de este muchacho noble, David (a), y lo convocó para definir la victoria.
Y qué elocuente lección para los que estaban con Saúl (a), que eran los que daban un gran peso a las razones materiales, pues cuando {les dijo su profeta: «Ciertamente, Dios ha mandado para vosotros a Saúl como rey». Dijeron: «¿Acaso habría él de tener el reino sobre nosotros y nosotros más derecho al reino que él? Y él no ha recibido abundancia de bienes». Dijo: «Ciertamente Dios, le ha elegido sobre vosotros y le ha aumentado abundantemente en la ciencia y el físico. Y Dios entrega su reino a quién quiere. Y Dios es Amplio, Sabio»}, sura «Al-Báqara» (La vaca), 247.
Y cuando vieron el número y el equipo del ejército de Goliat, {dijeron: no tenemos energías hoy por Goliat y su ejército}, sura «Al-Báqara» (La vaca), 249.
En esta elocuente lección, Dios Glorificado sea y Altísimo demostró que en la acción y en el campo de enfrentamiento, las causas materiales no sirven ante la devoción a Él, Glorificado sea. Así pues, el Glorificado y Altísimo enfrentó al ejército de Goliat de colosal equipo más moderno y más mortal en armas de su tiempo con la devoción de David (a).
Y cuántos de nosotros hoy necesitamos de esta elocuente lección para aprender el significado de la devoción y de encomendarse a Dios, Glorificado sea, sin disuadirnos por las ecuaciones de lista sobre la tierra del enfrentamiento al diablo y su ejército.
Y la paz sea con vosotros y la misericordia de Dios y sus bendiciones.