Lo que está haciendo el Estado sionista es un genocidio en toda regla.
Han declarado públicamente ante el mundo entero que no tratarán al pueblo palestino o a los habitantes de Gaza como seres humanos.
Por eso les han cortado el agua, la electricidad y los alimentos, y han permitido la matanza de civiles, sin importarles los inocentes, niños, mujeres y ancianos.
Este es el modus operandi de los monstruos del Estado sionista en cada guerra. Son criminales y asesinos que no ven ningún respeto por cualquiera que amenace su ocupación de la querida Palestina.
¿Dónde está la Organización de las Naciones Unidas? ¿Dónde están las organizaciones de derechos humanos? ¿Dónde están las naciones que se hacen llamar policías del mundo?
Aquí vemos que cada pájaro ha caído en su propia trampa, y que cada igual se ha atraído y ha apoyado a su igual, como Estados Unidos y el Reino Unido, que han anunciado su vergonzoso apoyo al criminal Estado sionista.
Antes de terminar, me gustaría preguntar a los que han llenado el mundo de ruido con el lema «¡Vamos, Jerusalén!» durante cincuenta años. Me gustaría hacerles una pregunta inocente, en dialecto iraquí:
¿Llegaron? ¿O todavía les queda? ¿Cuánto queda para llegar? ¿Acaso necesitan algo?
¿Es posible que veamos de vosotros una postura diferente a las consignas y las arengas que no tienen ningún valor en la realidad?
Tenéis dinero, armas y milicias, así que no hay excusa.
¿O solo sois capaces de oprimir, matar, encarcelar, debilitar y desplazar a los pobres y los inocentes?
Esperamos ver acciones en el campo de batalla. Las palabras y las afirmaciones falsas son el oficio de los mentirosos, los cobardes, los hipócritas y los charlatanes.
¡Dios ayude a los combatientes en Palestina, humille a los roedores del Estado sionista y haga de la tierra de Palestina su tumba!
