• Categoría de la entrada:La ilusión del ateísmo
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Judíos y cristianos creen que la descendencia de Adán (con él sea la paz) es resultado del incesto y de la unión de hermanos con hermanas, y creen que Eva fue creada de una costilla del cuerpo de Adán. Ellos son el origen de esta creencia corrupta, y de ellos pasó a los sunníes y a algunos shiíes.

Fue mencionado en el Antiguo Testamento — la Torá, con respecto a la creación de Eva:

[Entonces el SEÑOR Dios hizo caer un sueño profundo sobre el hombre, y éste se durmió; y Dios tomó una de sus costillas, y cerró la carne en ese lugar. Y de la costilla que el SEÑOR Dios había tomado del hombre, formó una mujer y la trajo al hombre].[1]

Antonios Fekry dice en su interpretación de este versículo de la Torá:

«Dios hizo a Eva de la costilla de Adán. La costilla está junto al corazón y bajo el brazo para que él pueda rodearla con su amor y protegerla con su brazo. No fue hecha de su cabeza, para que no actúe presuntuosamente con él, ni de su pie, para que él no la pise. Fíjense en la manera de Dios, pues Dios tomó una costilla de Adán, es decir, que Dios le privó de algo, es decir, una de sus costillas, pero ¿qué le da a él después de eso? Una determinada contraparte. Y así, por todo lo que Dios nos priva, nos compensa con múltiples bendiciones».[2]

Y el Sacerdote Tadrous Yacoub dice:

«Él nos habló de su creación, de Eva, como una única esposa de Adán, que la produjo para él de su costado, después de ponerlo a dormir… Adán vio que ella era hueso de sus huesos y carne de su carne. La llamó varona porque de varón fue tomada».[3]

Está mencionado en el Antiguo Testamento — la Torá con respecto a la descendencia de Adán:

[Y conoció Caín a su mujer, y ella concibió y dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad y la llamó Enoc, como el nombre de su hijo.][4]

Antonios Fekry dice al explicar este versículo de la Torá — Antiguo Testamento:

«La mujer de Caín era su hermana. Dios permitió esto al principio para establecer una descendencia y Enoc era el tercero de Adán por el lado de Caín. Tenía casi el mismo nombre que Enós, descendiente de la séptima generación de Adán por el lado de Set».[5]

Se explicará cómo estas creencias corruptas son contrarias a los hechos establecidos en la biología y cómo estas creencias corruptas colocan al ser humano en un nivel inferior al de los chimpancés, gorilas y algunos otros animales que evitan el incesto.

[1] Antiguo Testamento – Génesis 2:21-22.

[2] Interpretación del Libro Sagrado – Antiguo Testamento – Padre Antonios Fekry.

[3] Interpretación del Libro Sagrado – Antiguo Testamento – Sacerdote Tadrous Yacoub.

[4] Antiguo Testamento – Génesis 4:17.

[5] Interpretación del Libro Sagrado – Antiguo Testamento – Padre Antonios Fekry.


Extracto del libro La ilusión del ateísmo de Ahmed Alhasan (a)