Ahmed Alhasan احمد الحسن
Safaa Al Awadi
La única base filosófica de la democracia es la teoría del contrato social, que es un contrato entre el gobernante y el gobernado. Este contrato da legitimidad a un poder único que es el poder del Estado, llamado poder coercitivo. Los instrumentos de este poder son la policía, el ejército y otros instrumentos para hacer cumplir la ley y proteger el Estado. Cualquier poder fuera del control del Estado son pandillas a las que la sociedad no está obligada a someterse.
En Iraq:
1- Las elecciones no son limpias. La mayoría del pueblo iraquí no ha participado, así que su resultado no puede considerarse un contrato con la sociedad. Además, el ganador de las elecciones se ha visto forzado a retirarse, dejando la autoridad a los partidos perdedores. Esto hecha a perder el sentido que le quedaba al contrato. Así que lo iraquíes están gobernados por una camarilla autoritaria que no los representa.
2- La base del contrato social se basa en que el gobierno vele por los intereses de la sociedad contratante. Pero vemos que el gobierno de Iraq trabaja en beneficio de otras sociedades que han dañado mucho los intereses de la sociedad iraquí. Esto es una traición y quien traiciona a la sociedad no sirve para liderarla.
3- Si un barco es dirigido por más de un capitán, su destino es hundirse. Hoy el gobierno de Iraq está dividido en facciones enfrentadas. Algunas de ellas se fortalecen con el dinero sucio tomado a la fuerza de la sociedad iraquí. El resultado hoy está a la vista: el colapso de la educación, la salud, la agricultura, la industria, las telecomunicaciones, la electricidad, el agua y demás que nadie puede negar. Y tampoco nadie puede negar la obscena riqueza de los personales políticos.
Otros muchos puntos indican, innegablemente, que la sociedad iraquí vive la peor injusticia por parte de la clase gobernante. La única solución para los iraquíes es liberarse de esta clase y de este proceso político fracasado y corrupto. La administración de la justicia que está en sus manos, los medios que están en sus manos, América y los países vecinos que los apoyan, todos se benefician de la existencia de ellos, menos los iraquíes.